Parece obvio: utiliza los accesorios
adecuados. Ponte el casco y demás implementos
de seguridad. No eres de acero.
Del afán no queda sino… No sobrepases
el límite de velocidad. Siempre ten
precaución y más si transitas avenidas concurridas.
Como en la fila del colegio: conserva
la distancia. Sé prudente en la vía y no “culebrees”
entre los vehículos.
Lógicamente, no conduzcas en estado
de embriaguez. Esto reduce tus reflejos
y capacidad de reaccionar al peligro.
¡Buena comunicación con tu parrillero!
Adviértele acerca de no realizar movimientos
bruscos que te hagan perder el equilibrio.
¡Pilas! Ten cuidado en los cruces.
Mantente atento a las señales de tránsito.
Turn on the lights! Utiliza siempre las
luces. Así serás visible en la vía.
¡Con calma! No eres doble de riesgo.
Las vías no son el escenario para hacer trucos
que puedan ocasionar accidentes.
Cuida tu postura. De esto depende que
la moto esté equilibrada para no caerte. Como
dirían las mamás: “¡Siéntese bien, mijo!”.
¡Como a la palma de tu mano! Asegúrate
de que conoces tu moto y sus partes, así
sabrás si algo está fallando en medio de tu viaje.
En moto, en cicla, a pie, en carro particular o en transporte público, como tú lo quieras. Te esperamos con tu familia y amigos en nuestros parques Comfama. ¡Noviembre tiene programación especial para ti!
Fuentes: Motorpasión, Guioteca motos y Motorpress.