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0 ¿Es necesario el ejercicio democrático desde el colegio?
Es totalmente necesario porque es la forma en que todos los integrantes de las comunidades educativas podemos hacer parte en la toma de decisiones. Desde un consejo estudiantil que recoge las necesidades específicas de los estudiantes de cada grado; un consejo académico que orienta los planes de estudio; un consejo directivo que decide sobre los asuntos de mayor importancia institucional; un comité escolar de convivencia que promueve las buenas relaciones entre estudiantes; y un consejo de padres que potencializa la participación de las familias en la institución. Todos estos escenarios son claves para fortalecer la democracia y para que todos nos sintamos parte del mejoramiento permanente de nuestras instituciones educativas.
¿Por qué crees que a veces no se cumplen las propuestas que se hacen en los colegios y en los escenarios políticos?
En el escenario estudiantil, muchas de las propuestas no se cumplen porque los líderes no sienten total apoyo por parte de los docentes y por eso no pueden llevar a cabo muchos de sus proyectos. No estoy muy enterado de cómo sea la administración en la política profesional, pero en lo que conozco, muchos de los que
han ejercido grandes cargos no están bien preparados, no lo hacen con pasión y por ello muchas de sus propuestas no se cumplen. Pienso que estas situaciones pueden ser evitadas si el ciudadano decide alfabetizarse en el ámbito político para escoger un líder que esté abierto a debates argumentados y a la socialización de sus proyectos.
(Lee también: “Queríamos conquistar el mundo, ahora vamos por el universo”).
¿Por qué ser líder estudiantil?
Para poner de tu parte y mejorar las cosas que a veces solamente criticamos, pero no asumimos en nuestra institución. Cuando esto se hace se aprende a tener carisma, a ser generoso, a socializar con otros y a tener valentía para afrontar los problemas con la mejor actitud.
La realización de proyectos que potencialicen el desarrollo cognitivo de los estudiantes; el fomento de las buenas relaciones interpersonales entre la comunidad educativa; capacitaciones para la atención y prevención de desastres; y el aumento del nivel de lectura y cultura ciudadana fueron algunas de las principales propuestas de Santiago.
