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0 Jairo de Jesús Atehortúa es campesino, vive en Santa Elena y diario, a las cuatro de la mañana, viaja a Medellín e instala su negocio de venta de flores en una esquina del segundo parque de Laureles. Cristian Raigosa es emprendedor y cofundador de Rituales, compañía de café. Ambos tienen vidas distintas, pero creen que el diálogo y reconocer nuestras diferencias son las salidas a nuestros conflictos.
¿QUÉ ES LO QUE MÁS LE GUSTA DE SER COLOMBIANO?
JAIRO DE J. ATEHORTÚA: Me gusta la libertad que tenemos, hay otros países donde la están pasando muy mal. Este terruño no lo cambio por nada.
CRISTIAN RAIGOSA: El país que habitamos, su potencial, su gente, los privilegios que tenemos al vivir acá y las responsabilidades que esto mismo conlleva.
¿QUÉ PIENSA DE LOS QUE MARCHAN?
J: Están tratando de solucionar un problema. Se están haciendo sentir frente al Gobierno.
C: En su mayoría los admiro y les agradezco por hacer sentir las inconformidades, hay mucha gente que la tiene clara y que sabe por qué está ahí. También pienso que se debería proteger con mucha tenacidad la causa de las marchas, y no permitir que se tergiverse el mensaje.
¿CREE QUE USTED ES VULNERABLE?
J: Claro. La consecuencia de esos conflictos es que todos nos afectamos.
C: Todos somos vulnerables a la violencia, unos más que otros.
¿QUÉ SE IMAGINA QUE AYUDARÍA A SOLUCIONAR LAS INCONFORMIDADES?
J: Que el Gobierno concrete un diálogo con todos los sectores.
C: El diálogo y ver el país con una visión macro por el potencial que tenemos.
¿USTED CONFÍA EN LA GENTE?
J: En algunas personas sí, en otras no. Igual creo que uno tiene que estar atento y desconfiar a veces.
C: Sí.
¿QUÉ CREE QUE ESTÁ MAL EN COLOMBIA?
J: Que nos falta armonía y paz. La salud, la educación y las oportunidades de empleo deben mejorar.
C: Los valores, adoptamos una cultura de corrupción y violencia, nos falta mucha educación.
UN CONSEJO PARA EL GOBIERNO
J: Le diría que los campesinos estamos desprotegidos, que no tenemos apoyo del Gobierno. Falta una cooperativa que sea justa con los precios de los productos que cultivamos en el campo.
C: No más corrupción, no más política de guerra.
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¿POR QUÉ DIALOGAR PUEDE SER UNA SALIDA A LOS CONFLICTOS?
