Suena el despertador, hay que levantarse rápido para alistarse y salir a trabajar. En la oficina, y con un buen café al lado, comienzas las tareas hasta la hora del almuerzo. En la tarde asistes a un par de reuniones, entregas un informe, comienzas otro. Y así, transcurre tu tiempo laboral, todos los días, todas las semanas.
Tal vez no se te había pasado por la cabeza, pero en medio de la jornada laboral hay una franja de tiempo que puedes usar para ti. La hora del almuerzo puede servir para otras cosas diferentes a comer. ¡Tu mente y tu salud lo agradecerán!
Siempre ten en cuenta las condiciones ambientales del lugar donde vives antes de realizar ejercicio. ¡Es por tu salud!
Investigadores de la Universidad de Birmingham, Inglaterra, realizaron un estudio con un grupo de trabajadores, quienes caminaron varios minutos, tres veces a la semana, durante su hora de comida. Cada quien caminaba a su ritmo, unos despacio, otros más rápido, solos y en grupo. Después de varias semanas los caminantes manifestaron sentirse entusiastas, menos tensos y, por lo general, más relajados.
Es que cambiar de actividad nos permite descansar la mente, y además de favorecer la creatividad y productividad laboral, brinda una sensación de bienestar al liberar el estrés y ayudar a combatir la monotonía. Ya lo sabes. No obstante, si no te animas al mediodía, te damos otras alternativas:
- Si no tienes restricciones médicas, evita las escaleras mecánicas y el ascensor.
- Movilízate en bicicleta.
- Si vas en Metro o en bus, bájate una parada antes y camina el último tramo.
- Si debes usar tu carro, parquéalo un poco más lejos.
Buena idea
Que camines en el centro de Medellín, pues como parte de la recuperación cultural de los lugares y plazuelas públicas de la ciudad, Comfama y más de 60 entidades de Medellín apoyan la iniciativa Caminá pa’l centro, un espacio para vivir la riqueza artística y cultural de este lugar que es de todos.
Fuentes: Departamento de Bienestar y Salud Integral Comfama, Estudio Universidad de Birmingham.