La mujer busca transformar sus cualidades en expresiones artísticas. El dolor, los sueños, la naturaleza, la cotidianidad, el amor y hasta el desamor inspiraron las obras de artistas como la pintora mexicana Frida Kahlo y la colombiana Débora Arango.

Esa misma cotidianidad es la que atrae a Amalia Restrepo, ilustradora y arquitecta colombiana, que como ella misma se define, es “una mujer convertida al arte”.

En el 2017 se concentró en las mujeres, las ilustró fuertes, solas, libres, felices, tristes. Transformó en arte a mujeres reales.

¿Por qué ilustrar mujeres?
Ilustrar me obliga a conectarme con mi humanidad. Ilustro mujeres y hombres, pero siento que estoy más conectada con la lucha femenina, porque es mi propia lucha.

¿Por qué reivindicar lo femenino?
El femenino es algo innato en todos los seres humanos, son características con las que nacemos, que han sido catalogadas como débiles, pero en realidad se traducen en creatividad, protección, ternura y creación. El femenino no debe ser ni es exclusivo de las mujeres. Se debe reivindicar para el bienestar y la realización de todos los seres humanos.

¿Qué hay de masculino en las mujeres y cómo se vale de ello a la hora de ilustrar?
El masculino, para mí, representa poder y fuerza. Todas las mujeres tenemos poder, todas somos fuertes. Me gusta ilustrar mujeres que representen lo perfecta que es la dualidad femenina y masculina.

¿Por qué ilustrar?
Creo que a eso vine. Hay cosas que no se pueden negar. El cielo es azul, el pasto es verde. Yo necesito ilustrar para poder expresarme, es mi idioma.

En 2016 Medicina Legal reportó para Antioquia 509 casos de maltrato a niñas y adolescentes mujeres.

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